sábado, 18 de septiembre de 2010

Suerte!


La suerte es algo que cambia de un segundo a otro, tarde como ocho dias en un hospital para darme cuenta de esto (soy un poco lento, lo se), es que por fin tuve tiempo para pensar y dedicarme a recrear la mente para alimentarla con conocimiento, eriqueciendola a cada segundo como para no sentir que perdia el tiempo, también aproveché para comer en las horas correctas y dormir. Esto continúo asi por mas o menos 4 dias y un dolor acompañado de ruidos tremendos en la noche surgian de mi interior como vuvuzelas roncas, si habia olvidado ir al baño con la internación, es que estaba muy comodo y contiuamente habia enfermeras que me servian, sin contar a mi familia (por fin habia vuelto a ser el centro de atención), pero no queria moverme para ir al baño. Al dia siguiente me levante para asearme (a esto también me obligaban) y no aguante mas, tranque la puerta del baño y me dispuse a colocar papel higienico para cubrir todo lugar de contacto entre mis nalgas y el water para poder hacer aquello que casi habia olvidado como.
Hize mucha fuerza, los musculos de mi cuerpo se tensarón luego gotas de sudor, pero fue imposible, habia algo que no dejaba que saliera lo que se supone que tiene que estar afuera y no dentro. Me di por vencido.
Luego de un par de horas una de las enfermeras me pregunto "¿pudistes ir de cuerpo?" sin saber como sabia de lo acontecido me entro la duda de si no tendrian camaras en los baños y respondi con un timido, "No quizo salir" y sonreí. La enfermera sonriendo tiernamente me dijo "ah! entonces vamos a tener que colocarte una sonda" y se fue de la sala con una extraño gesto en el rostro como si disfrutara lo que estaba sucediendo. Katy era su nombre, corria el año 2003 y cursabamos 5 año de liceo, si, es verdad, una ex companiera iba a ser la encargada de colocarme una sonda en el trasero,(casi como castigo por hablar tanto en clase) no podia dejar que eso pasara, corri al baño nuevamente y luego de un par de laxantes de por medio hize lo que nunca en mi vida habia echo (por lo menos nunca tanta cantidad). Sali del baño sintiendome muy liviano, casi como una libelula, sentia flotar entre nubes con un leve ardor en la zona por tanto esfuerzo pero feliz me senti el tipo con mas suerte del mundo.

No hay comentarios: